Preparación

Esta receta es sencillísima, pero es una de mis ensaladas favoritas y se puede tomar tanto templada como fría.

Lo primero que hacemos es poner a cocer la pasta. mientras la tenemos al fuego podemos ir preparando el aliño. para ello ponemos en un bol los dientes de ajo y el perejil bien picaditos. hacemos lo mismo con los tomates deshidratados (que tendremos hidratados del día anterior, o si se os olvida, como me pasa a mi siempre, les pegamos un calentón en el micro cubiertos de agua y los dejamos ablandar un rato). cubrimos todo esto con el aceite, añadimos un poco de sal y removemos y machacamos un poco todo para que vaya cogiendo sabor (lo podéis dejar echo del día anterior si queréis).

Vigilad la pasta y si ya está cocida retiradla del fuego, pasadla por agua fría para cortar la cocción y reservarla.

Ahora sólo queda picar los frutos secos y añadirlos a la pasta junto con las pipas de girasol y el sésamo, echamos también nuestro aliño removemos bien y ya lo tenemos listo.

Como dije al principio se puede tomar así directamente o dejar enfriar en la nevera. por supuesto podéis variar las semillas y los frutos secos añadiendo lo que más os guste y también queda muy rica sustituyendo el perejil por albahaca.