Preparación

Las cantidades señaladas son a ojo, no necesitan ser exactas. Yo veo qué tengo y así lo armo.

Quinoa:

Lavar la quinoa con abundante agua utilizando un colador. Escurrir hasta que el agua deje de salir jabonosa y quede cristalina. Este proceso es importante pues sirve para eliminar la saponina que recubre al grano y que le da un sabor amargo y poco agradable.

Colocar una taza de quinoa en una olla con 2 ½ tazas de agua durante 5 minutos. Reducir a fuego lento y cocinar hasta que el agua sea absorbida (aproximadamente 10 minutos). La quinoa está lista cuando el grano esté blanco a transparente y el germen espiral se haya separado. La sal se agrega siempre una vez que la quinoa ya se encuentra cocida.

Consejo: Previo a la cocción tostar la quinoa en una sartén con aceite, removiendo de manera constante. Esto le dará al grano un sabor que recuerda al de la nuez.

Lenteja:

Las legumbres deben hidratarse antes de cocinarlas. Las lentejas necesitan estar en remojo con agua fría entre 2 - 4 horas.

Luego, es necesario enjuagar las legumbres luego del remojo antes de cocinarlas.

Las lentejas se introducirán en agua fría abundante de manera que las cubra perfectamente. Se pondrá a hervir a fuego rápido durante unos 10 minutos y luego detendrá la cocción. Se eliminará el agua de cocción y se añadirá agua nueva dejando que se cuezan lentamente durante mucho tiempo. Si se cuecen en cacerola, se dejará aprox. 60 - 75 minutos y en olla a presión 25 minutos.

Trigo burgol:

Remojar en agua (por cada taza de trigo, tres de agua) por 20 minutos y cocinar solo 10 minutos, por que ya está precocido. Por esta razón también puede consumirse sin cocción, se pone en remojo.

Con todo listo se procesan las lentejas hasta que queden como un puré (yo dejo algunas lentejas enteras). Se mezclan todos los ingredientes en un bol y se agrega la cebolla, el morrón y el tomate picados chicos. Luego se agrega el puré de tomate y se condimenta la mezcla.

Puede dejar reposar un rato todo bien mezclado en la heladera.

La mezcla se acomoda en un molde y se presiona para que quede compacta. Yo uso una budinera de silicona que es fácil de desmoldar o un molde de bizcochuelo también de silicona.

Se cocina a horno moderado por 10 minutos porque todo está ya cocido. La idea es que quede un poco más firme.

Se acompaña perfectamente con una ensalada de hojas verdes, tabule o puré de garbanzos.