Preparación

Moler la coliflor hasta que tenga aspecto de arroz o cuscus. usar una picadora o procesador de alimentos, pero si no se tiene nada de eso... con maña, paciencia y un buen cuchillo se logra lo mismo. Es posible que esto demore un rato.

Hornear la coliflor o cocinarla pocos minutos en el microondas. la idea es que pierda el máximo de agua posible y que quede suave, para hacer la masa.

Cuando la coliflor esté tierna, mezclarla vigorozamente en un recipiente con las semillas de lino, almendras molidas, sal, orégano y aceite. debe quedar como una pasta compacta, para hacer la masa. mientras menos húmeda esté, más crujiente quedará la base de pizza. para lograr esto, se puede agregar más almendra molida o pasar la mezcla por un sedazo, exprimiendo el exceso de agua.

Precalentar el horno a unos 200 grados, mientras se estira la masa en una placa de horno o sobre papel para hornear.

Meter la masa estirada en el horno, para comenzar su horneado. mientras, freir el ajo en láminas en poco aceite, y las calabacitas en rodajas.

Cuando las calabacitas estén tiernas y el ajo, dorado. sacar la base de pizza del horno y untar sobre ella la pasta de tomates ayudándose con una cuchara. luego poner el ajo frito y las calabacitas cocidas sobre la salsa.

Opcionalmente se le puede incluir queso vegano, tofu en tiras, alcaparras o aceitunas... como se guste. en lo personal, prefiero las pizzas con pocos ingredientes... creo que se potencian mejor los sabores.

Meter nuevamente al horno, hasta que la masa esté dorada y al punto de cada gusto.

Al momento de servir, adornar con las espinacas o rúcula, y agregar un chorrito de aceite de oliva crudo. :)

A disfrutar!