Preparación

Comenzamos haciendo la masa (la de mostaza y media.http://mostazaymedia.blogspot.com.es/2014/05/lentejas-en-varios-formatos.html soy muy fan.). para ello tenemos que poner el día anterior las lentejas a remojo. cuando las tengamos escurridas y lavadas las ponemos en el vaso batidor con todos los ingredientes. respecto a la receta original esta vez cambié el pimiento italiano por el rojo, y como añadí la remolacha cocida ya eliminé el chorrito de agua. añadí la remolacha sólo para intentar darle a la masa un tono morado o rosado, pero al cocinarla se va completamente (fracaso absoluto) así que la podéis omitir si queréis.

Batimos todo bien y dejamos reposar. yo me administro muy mal el tiempo así que dejo reposar la masa sólo un rato mientras hago la salsa.

Para hacer la salsa cogemos un mortero y echamos en primer lugar los granos de cilantro (siempre uso las semillas de cilantro en lugar de las hojas. tienen un sabor cítrico muy concentrado que me encanta. cuando hagáis guacamole probad a echárselas y ya veréis a que me refiero). machacamos bien los granos con las hojas de orégano y albahaca con una pizquita de sal gorda que nos va a ayudar a machacarlas bien. echamos un poco de piel de lima rayada, un poco de su zumo, machacamos más, añadimos unas 4 cucharadas de veganesa, mezclamos bien todo y lo reservamos mientras cocinamos la masa.

Para hacer los conos removemos un poco la masa y echamos dos cucharadas en una sartén manchada de aceite (¡nos libramos de los líos de la plancha! ¡¡¡ bien!!!). esparcimos bien la masa con una cuchara, intentando darle forma cuadrada.

Cocinamos a fuego medio. igual que para hacer el wrap (http://www.haztevegetariano.com/receta/4642/wrap_vegetal_de_masa_de_lentejas) nos fijamos en la superficie de la masa. cuando haya perdido humedad y no nos queden pegotes en la cuchara al tocarla, podemos darle la vuelta. aplastamos, volteamos, aplastamos, volteamos,... como con el wrap buscamos que quede doradita, pero no crujientre. incluso puede quedar menos echa porque cuando esté un poco dorada la vamos a meter al horno. para ello sacamos el cuadradito de masa y lo cortamos en diagonal haciendo dos triángulos. ponemos un cono metálico en uno de los extremos del triángulo y enrollamos (por eso es importante que la masa no esté crujiente). cuando tengamos el cono de masa lo sujetamos con cordel para cocina. vamos haciendo esto con toda la masa. cuando os quede poca podéis poner el horno a precalentar a unos 150 grados, con ventilador.

Ponemos todos los conos en una bandeja y los metemos en el horno. vigiladlos cada poco tiempo, porque lo que buscamos es que pierdan la humedad y queden rígidos, pero la línea entre eso y que queden churruscados es muy fina. tened en cuenta que sucede como con las galletas que al sacarlas del horno ganan más firmeza. así que no os paséis con el tiempo

Mientras tenemos el horno ocupado nos ponemos con el relleno. simplemente hay que cortar en taquitos todos los ingredientes (la zanahoria la podemos rayar directamente) reservando las hojas de lechuga. las hojas tienen que ser pequeñitas, para adornar los conos. yo usé las del corazón de una lechuga. obviamente podéis rellenarlos con la ensalada que más os guste. yo los tengo echo con esto mismo pero añadiéndole unas setas a la plancha y quedan tremendos. bueno, que cuando tengáis toda la verdura picadita la mezcláis con la salsa y ya tenéis el relleno.

Sacamos los conos del horno, les cortamos el cordón, les metemos una cucharada de relleno, ponemos la hoja de lechuga y otra cucharada más. presentamos en una bandeja y ya está listo.

Como veis es una receta bastante trabajosa. pero también se podrían dejar hechos los conos del día anterior totalmente acabados, o atados, en el paso previo a meterlos en el horno, si queréis que estén calientes en el momento de comerlos.

Creo que estos conitos son un aperitivo con el que podéis dejar alucinadas a las visitas. el cucurucho crujiente, contrastando con el relleno con el aguacate blandito y la salsa fresca... una locura.