Preparación

Tostar las avellanas en una sartén durante 10 minutos a fuego lento, dándoles vueltas de vez en cuando para que no se quemen.

Crear un compuesto cremoso con las avellanas tostadas: cuando estén tibias, pasarlas en la licuadora o triturarlas con el mortero. Se tendrán que triturar hasta que liberen su aceite y empiece a formarse la crema de avellanas y hasta que sean un polvo muy fino.

Entonces, deshacer el chocolare a baño maría. Se aconseja un chocolate negro 60% para que no sea demasiado amargo, si no se puede endulzar con una cucharadita de azúcar de caña. Ir mezclando hasta que el chocolate fundido sea homogéneo.

Cuando el chocolate esté listo y aún muy líquido, apagar el fuego y añadir la crema de avellanas. Mezclar con una cuchara y amalgamar bien los dos ingredientes.

Rellenar con el compuesto los moldes y dejarlos enfriar a temperatura ambiente durante un par de horas. Cuando estén fríos y sólidos, dejarlos en la nevera unos 20-30 minutos para poderlos sacar fácilmente de los moldes.

El molde para que dé la forma del "gianduiotto" original se puede comprar por internet. También se puede aprovechar el molde para hacer bombones.

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